San Gilberto de Sempringham

Fiesta 16 de febrero

Gilbert nació en Lincolnshire, Inglaterra, alrededor de 1083, hijo de un rico caballero y su esposa. Deformado al nacer, no era apto para ser un caballero y, en cambio, se dedicó a aprender.

Con el tiempo, Gilbert fue ordenado sacerdote y pastor de dos iglesias en la propiedad de su padre.

Entre sus feligreses había siete jóvenes devotas que vivían bajo su dirección. Con la esperanza de establecer una comunidad religiosa para ellos, construyó una casa modesta y desarrolló una orden basada en la regla de San Benito.

Pronto, admitió hermanas laicas en su comunidad y más tarde, a medida que la orden se extendió gradualmente, hermanos laicos para proporcionar trabajo manual.

Por último, Gilbert incluyó capellanes para las monjas. Así se desarrollaron los gilbertinos, la única orden religiosa medieval de origen inglés, y el propio Gilbert finalmente se convirtió en jefe de la orden.

Su generosidad era legendaria. Tenía tal amor por los menos afortunados, que la mayoría de las limosnas recibidas de sus feligreses fueron donadas a los pobres.

En su mesa siempre tenía un plato adicional, al que llamaba “el plato del Señor Jesús”. En este plato puso comida de la más alta calidad disponible y luego se la dio a los pobres.

Gilbert siguió siendo el jefe de la orden hasta que comenzó a quedarse ciego. Murió en 1189 a los 106 años y fue canonizado en 1202.